SINCRONÍA ESPIRITUAL (1ra Parte)
Los cielos cuentan la gloria de Dios, Y el firmamento anuncia la obra de sus manos. Un día emite palabra a otro día, y una noche a otra noche declara sabiduría. No hay lenguaje, ni palabras, ni es oída su voz.
- Salmos 19:1-3 -
Somos espirituales, mora dentro de nosotros la persona del Espíritu Santo. Consideramos en serio aquello de que “tenemos la mente de Cristo” (I Co. 2:16) o sea, que podemos ser guiados por El, sin intermediarios. “Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios.” Rom 8:14
El pasaje de Corintios dice así: “… «¿Quién sabe lo que piensa el Señor? ¿Quién puede darle consejos?» Pero nosotros tenemos el Espíritu de Dios, y por eso pensamos como Cristo. 1Co 2:16 TLA
Sincronía: El término sincronía proviene del griego "syn" (que significa juntos o en conjunto) y "cronos" (que significa tiempo) por lo cual puede ser entendido como algo que sucede mismo tiempo. La sincronía siempre nos habla de una situación en la cual dos personas o dos elementos actúan de manera conjunta y pareja.
Es la coincidencia en el tiempo de dos o más hechos, fenómenos o circunstancias, especialmente cuando el ritmo de uno es adecuado al de otro. Queridos hermanos del Shaddai, somos llamados a vivir en armonía y concordancia con la voluntad de Dios “en tiempo real”, o sea, que al constituirnos sus hijos Dios nos invita a caminar “desde ya”, cada día bajo su cuidado y guiados en cada paso hacia una nueva vida, un nuevo plan, un nuevo propósito, el propósito de Dios. Es un hecho que Dios planea que cada minuto de nuestro tiempo tenga valor eterno y cada una de nuestras acciones sean de valor trascendente, pues nos lleva de la mano nuestro Padre Celestial, el Dios que trasciende y cuyos pensamientos hacia nosotros “son más altos que los cielos…” (Is. 55:9). Lea con calma y reflexione esto en oración.
Un asunto nuevo para nosotros es que Dios es eterno, infinito y nosotros somos seres finitos. Dios, es el gran Yo Soy, eternamente presente, sin variación. Nosotros necesitamos la medición del tiempo, Dios trasciende el tiempo de los hombres. Por medio de las escrituras podemos ver en parte la manera como Dios ve nuestro tiempo y como El se maneja.
Nosotros decimos: Faltan cuatro meses para la cosecha; ÉL dice: Ya es el tiempo de la cosecha… Jn. 4:35
Nosotros hablamos de tardanza: Para Dios es paciencia… 2 Pedro 3:9
Nosotros duramos según calendarios de años; Dios puede decir que para EL, un día es como mil años… 2 Pedro 3:8
Nosotros hablamos de pasado, presente y futuro, ÉL se dice: Yo soy, en cualquier tiempo y es el principio y el fin. Ex. 3:14
Nosotros decimos, mañana haremos esto o aquello… pero hay un día en que Dios dice: el tiempo no será más… Apoc. 10:6
Asincronía: No entender quién es Dios y cómo El concibe el tiempo nos pone todas las veces en total falta de correspondencia temporal con lo que Dios piensa o hace. Hay un aspecto positivo de la Asincronía, y es que es la clave del ritmo. Mandamos un chat por Wassapp y casi de inmediato alguien contesta, completa la idea, aclara, contradice, etc. Contestan en asincronía.
(CONTINUARÁ…)